Lerga se encuentra ubicada en el epicentro de la Historia navarra, con el Castillo de Javier, el Monasterio de Leyre, la ciudad romana de Santa Criz de Eslava o el pueblo atalaya de Gallipienzo hacia el Este; las ciudades medievales de Olite y Ujué hacia el Sur.
Entre cepas y olivos centenarios podremos disfrutar del vino, del paisaje, de vestigios romanos y medievales. De la mano de los propietarios conocerás el proceso de elaboración y disfrutaras de la pasión por la viña y el vino. En Lerga podrás visitar el asentamiento prerrománico de Abaiz y conocer la ermita de Santa Bárbara donde se encontró la estela funeraria hispanorromana que posiblemente contenga palabras escritas en euskera.
Si viajas con niños, el paseo de animales tallados en árboles, obra de Ángel Illera, o el molino restaurado en el Olleta convertirán la visita en toda una aventura.